Autores de la Revisión: Arquitectos Luis Sesé y María Escalada, Historiador Arturo Azpeitia
Encargo de la Dirección de Urbanismo Sostenible del Ayuntamiento de Donostia-San Sebastián
La redacción del plan de protección municipal de 2009 cuyo texto refundido lo adaptó el Ayuntamiento en 2013, más allá de seleccionar los elementos protegidos, define niveles y tipos de intervención mediante ordenanzas generales y particulares recogidas en más de 1300 fichas (Autores: Luis Sesé y Blas Urbizu). Este plan define los grados de protección en función de las intervenciones a realizar, distinguiendo los casos de los bienes culturales declarados, de los edificios con elementos protegibles en su interior, los edificios con valores individuales o bien aquellos comprendidos en un entorno.
En la última fase de revisión de 2019-2020, la selección de elementos protegibles se lleva a cabo con los criterios mantenidos por este plan desde su primera versión:
Además, se considera oportuno incorporar un nuevo criterio de valoración paisajística de los sistemas parcelarios de villas y conventos, incluyendo su vegetación. La reciente sustitución de unos cuantos ejemplos importantes en la ciudad ha requerido de un análisis de esta clase de derribos y una revisión de los edificios susceptibles de seguir el mismo camino.
Por otro lado, y desde una visión arquitectónica, se hace un especial hincapié en los aspectos constructivos de todos los “neos” y las edificaciones originales prototipo de cada país o región que les sirven de copia (principalmente inglesas y francesas).
Asimismo, la protección del paisaje de las viviendas unifamiliares implica una reflexión sobre la arquitectura conventual que se inserta entre viviendas aisladas. Estos grandes edificios definen las características urbanas de su entorno, por ejemplo la configuración de calles o bien la implantación sobre plataformas. La peculiaridad de sus emplazamientos crea también una imagen en la memoria histórica del lugar así como una mayor diversidad ante la amenaza de su sustitución por un tejido residencial contemporáneo. Se plantea una protección compatible con todas las reutilizaciones que puedan tener cabida.